Este mecanismo permitió contactar de forma directa a personas migrantes retornadas en los municipios de intervención del proyecto PERSPECTIVAS; el Distrito Central, La Ceiba, Choluteca, Danlí y San Pedro Sula, asimismo, recopiló información clave e impulsó el interés activo de al menos 300 personas en programas de formación, salud emocional y emprendimiento.
Impulsado por el Proyecto PERSPECTIVAS, el piloto fue coordinado junto al Sistema de Atención al Migrante Retornado (SIAMIR) y el Observatorio de Desarrollo Social (ODS) y la Universidad de Groningen de Países Bajos, como parte de una apuesta regional por abordar de forma integral uno de los desafíos sociales más urgentes: la reintegración de quienes regresan tras intentar migrar.
“Este piloto demuestra que la innovación y el trabajo conjunto pueden transformar vidas y abrir nuevas oportunidades de reintegración digna y sostenible para las personas migrantes retornadas”, destacó Ana Leticia Aguilar, Secretaria General de la SISCA.
Uno de los logros más destacados fue el uso de un centro de llamadas operado por personal previamente capacitado, que estableció el primer contacto con miles de personas retornadas, combinando tecnología, análisis de datos y un enfoque humano.
El sistema fue construido con el respaldo técnico de la Universidad de Groningen, que garantizó un proceso transparente y representativo en la gestión de la base de datos.
Como resultado final de este esfuerzo 300 personas fueron identificadas como dispuestas a integrarse en procesos de formación y acompañamiento psicosocial.
Este piloto también representa una nueva apuesta estratégica de la Cooperación Alemana, que incursiona por primera vez en el sector de migración y reintegración en la región, con un enfoque basado en evidencia.
“La migración está conectada con crisis económicas, climáticas y políticas. Por eso, decidimos asumir este nuevo reto con un monitoreo riguroso, acompañamiento científico y una base de datos sólida que permita diseñar soluciones reales”, explicó Alexander Ehlert, director regional del Banco de Desarrollo Alemán KfW para Centroamérica.
Entre los hallazgos más relevantes, se identificó que los jóvenes (menores de 39 años) fueron el grupo que respondió con mayor frecuencia a las llamadas y mostró mayor disposición a participar en los servicios. Además, aunque los hombres respondieron con mayor frecuencia, ya que representan una gran mayoría de las personas migrantes retornadas, la respuesta de las mujeres fue proporcionalmente mayor en relación con el total de mujeres retornadas. También se evidenció que las personas retornadas responden mejor cuando comprenden claramente qué servicios se ofrecen, qué se espera de ellas y cuál será el acompañamiento.
Durante la presentación, se enfatizó la necesidad de fortalecer la articulación entre instituciones públicas, sector productivo y organizaciones locales. Cada municipio mapeó sus sectores económicos prioritarios, lo que permitirá alinear la formación y certificación de competencias con oportunidades reales de empleo o emprendimiento.
Además, durante la jornada, algunas organizaciones sumaron esfuerzos proponiendo la integración de sus programas como los de educación financiera con enfoque de género, entre otros con el fin de fortalecer y robustecer el ecosistema de reintegración para personas migrantes retornadas.
Como parte del evento, se desarrolló el panel de diálogo “¿Quiénes vuelven?”, que reunió a instituciones públicas y organizaciones de sociedad civil que trabajan con población en situación de migración retornada.
Se abordaron los principales desafíos para identificar y contactar a las personas retornadas, así como estrategias que están funcionando desde los territorios para vincularles a redes de apoyo, iniciativas productivas y servicios institucionales.
También se reflexionó sobre las barreras que persisten para lograr una reintegración efectiva, y se destacó la importancia de la coordinación interinstitucional y comunitaria.
El modelo desarrollado en Honduras, que sentó las bases para su posible réplica en otros países de la región. SICA, ya ha iniciado gestiones para presentarlo ante instancias regionales, como la Comisión de Directores de Migración y los Ministerios de Trabajo del SICA.
“Reafirmamos nuestro compromiso de promover esta experiencia como buena práctica regional y facilitar su escalamiento”, aseguró Ana Leticia Aguilar, Secretaria General de la SISCA.
Con este piloto, Honduras no solo avanza hacia una atención más integral a las personas migrantes retornadas, sino que ofrece a Centroamérica una herramienta concreta, innovadora y replicable para enfrentar uno de los mayores retos sociales de la región.
El Proyecto PERSPECTIVAS es financiado por la Cooperación Alemana a través del Banco de Desarrollo Alemán KfW, ejecutado por la Secretaría de la Integración Social Centroamericana (SISCA) con el apoyo de Swisscontact, en el marco de la alianza entre la República Federal de Alemania y la región SICA.