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GUATEMALA, 17 de mayo del 2021. Se estima que alrededor de 140 mil jóvenes carecen de acceso a una preparación más allá de su formación escolar inicial o bien no cuentan con la calificación demandada por las exigencias de sectores productivos de Guatemala, situación que repercute no solo en la empleabilidad de las y los jóvenes, sino también en la competitividad de las empresas e industrias. Sumado a esto, a nivel mundial la Organización Internacional del Trabajo (OIT) estima que para 2030 entre el 12 y el 50 por ciento de la fuerza de trabajo de un país puede necesitar cambiar de categoría ocupacional y/o aprender nuevas habilidades como resultado del desplazamiento de la automatización o el cambio de tecnologías.
Bajo esa perspectiva y con la experiencia internacional que tiene Swisscontact como facilitadores en la implementación de proyectos que apoyan un entorno empresarial sostenible, se suma AGEXPORT, para abrir alternativas y soluciones sólidas que permitan enfrentar la problemática del empleo, mejorando las condiciones de vida de jóvenes empleados y desempleados cualificados, mediante el acceso a una formación continua de alta calidad y pertinente, impulsando el desarrollo de nuevas competencias para mejorar su empleabilidad y movilidad en el mercado de empleo.
“ Swisscontact es una institución que nace desde el sector privado, y buscamos el involucramiento activo de este sector en todos nuestros proyectos, principalmente en los que están enfocados en la formación técnica profesional. Para el proyecto Innova, la participación del sector privado iniciará con un diagnóstico de necesidades de competencias demandadas por las empresas en los sectores de Alimentos y Bebidas, y TICs, y se extenderá a lo largo del proyecto Innova, en donde más que un participante esperamos el protagonismo de los actores privados.” Enfatizó el director de país de Swisscontact en Guatemala, Saúl Díaz.
En la experiencia de Swisscontact, la formación basada en el trabajo por lo general se vincula con las empresas y la industria, pero hay un contexto más amplio en el que esta formación juega un papel importante, en donde también a nivel de estado, los gobiernos están interesados en el aprendizaje permanente como medio para apoyar la transformación económica, la competitividad y aumentar la equidad.
Los sectores priorizados para este proyecto de trabajo dual o formación basado en el trabajo, serán el de alimentos y bebidas el cual genera el 11% del PIB nacional y crea gran cantidad de puestos de empleo directos e indirectos; y el de las tecnologías que da cuenta de un gran potencial hacia el futuro, proyectando la transición de una economía basada en recursos, a una economía basada en conocimientos o servicios.
“El sector exportador está comprometido en dar un nuevo impulso a los procesos de formación en el trabajo, ya que sabemos que somos una gran fuente de generación de empleo formal y nuestro objetivo a través de la firma de este convenio es sumarnos a mejorar el nivel de empleabilidad de tantos jóvenes que hay en Guatemala; pero también mejorar la competitividad empresarial del país, basándonos en la formación dual, equipamiento a las personas con recursos, conocimientos y habilidades que nos permitan mejorar sus posibilidades de empleo en todo nivel”, agregó el Directo General de AGEXPORT, Amador Carballido.
El proyecto se desarrollará en Ciudad de Guatemala, Sacatepéquez, Chimaltenango y Quetzaltenango y prevé enfocarse en la capacitación de instructores, planes de entrenamiento y currículas mejoradas, adaptación y mejora de ambientes de aprendizaje, modelos y metodologías de enseñanza, certificación de competencias laborales y mejora de los procesos de formación basada en el trabajo dentro y fuera de la empresa.
De igual manera se implementará en alianza con empresas y asociaciones del sector privado, centros de formación técnica profesional como INTECAP, instituciones académicas como la Universidad del Valle de Guatemala, Universidad Galileo, y empresas de los sectores priorizados, y viene a mejorar los servicios de formación en el lugar de trabajo, fortaleciendo las capacidades internas de las empresas, así como de otros prestadores (centros de formación, ONG’s, y academia, entre otros). Dichos servicios se modelan a partir de las necesidades planteadas por el sector privado y en coordinación y articulación intersectorial. Por otro lado, se espera diseñar normas y estándares para la construcción de un marco jurídico, institucional y formativo para la sostenibilidad de las innovaciones.
La formación basada en el trabajo se refiere a procesos de "educación o formación después de la educación inicial o la entrada en la vida laboral, destinada a ayudar a las personas a mejorar o actualizar sus conocimientos y/o habilidades, adquirir nuevas aptitudes para un cambio de carrera o un reciclaje, o continuar su desarrollo personal y profesional" según el National Centre for Vocational Education Research, 2013.